Nosotros ya nos hemos dejado conquistar por el espíritu navideño. Estamos deseosos de decorar nuestros días con brillantes luces, animados villancicos y sobre todo, ¡flores! Y hablando de esto ¿conoces la flor amarilis o amaryllis? Te contamos todo sobre sus características y cuidados para que no puedas decir no ;).
La amarilis tiene un “no se qué” que nos encanta. Científicamente es conocida como Hippesastrum y es una planta bulbosa perteneciente a la familia de las Amarilidáceas. Su toquecito tropical nos da algunas pistas de su origen: los bosques secos, tropicales y sabanas de países de América Central, del Sur e incluso del Caribe. Es conocida por su pluralidad de tonalidades y sus grandes flores y porque su planta puede llegar a medir entre los 40 y 60 centímetros de altura.
Su forma nos recuerda un poco a una azucena o a un lilium y lo cierto es que si la tienes en casa, habrás podido comprobar que es la compi-planta de interior perfecta. A la planta de amarilis le flipa la Navidad, tanto que es en esta época cuando tienen su primera floración. Además, sus flores duran muuucho y su belleza y color hace que sea el complemento perfecto de tu decoración, no solo navideña, si no de todo el año.
En cuanto a cuidados no te dará mucho la lata. La amarilis es perfecta para principiantes y una opción perfecta si tienes peques cerca ya que podrás ver el ciclo de vida completo de esta planta.
Cuidados de la Amarilis o Amaryllis
Resumen de sus cuidados
– Iluminación: Indirecta brillante.
– Temperatura: Entre los 20 y los 13º
– Riego: Moderado.
– Pet friendly: No.
– Kids Friendly: No.
Cultivo
Puedes comprar ya con sus flores o puedes cultivar la amarillis a partir de sus bulbos. En el caso que optes por la opción de los bulbos, es muy importante iniciar su plantación durante el inicio de la primavera o a principios de otoño y no debes enterrarlos demasiado. Fíjate que salga un tercio de los bulbos sobre la superficie. Además, debes plantarlos sobre una capa de arena para así evitar su putrefacción por encharcamiento.
Una vez plantados, su crecimiento no reposa ya que vive en un desarrollo constante. Solo tendrás que esperar unos días para que comiences a ver pequeñas yemas por la parte superior del bulbo. A las dos semanas aproximadamente, podrás apreciar sus tallos y seguirá creciendo y creciendo hasta que puedas disfrutar de sus bonitas flores.
Luz
El lugar preferido de la amarilis en otoño e invierno es dentro de casa. Colócala al lado de una ventana donde le entre luz pero no directa. El sol puede llegar a ser muy traicionero y si te descuidas, puede quemarla. El resto del año, cuando sus hojitas hayan caído, podemos moverla a un lugar un poco más oscuro. Si la dejas inmóvil, verás como sus tallos van creciendo buscando la luz. Nada que no solucione una buena rotación de la maceta de vez en cuando 😉
Riego
Ponte un recordatorio para regar a tu Amaryllis dos o tres veces a la semana durante la época de floración. Es muy importante que evitemos los encharcamientos, su tierra debe estar húmeda pero no en exceso. Para hacerlo, colócale agua en un plato y deja que ella misma beba directamente de él. Sí queridx, nuestra bonita amarilis es muy independiente. Durante el otoño e invierno, una vez que pierda sus flores y hojas, no hará falta que la riegues hasta el siguiente otoño.
Temperatura
Nuestra protagonista disfruta de las temperaturas cálidas, entre los 13 y los 20ºC. Recuerda que es nativa de países especialmente calurosos.
Sustrato
Le van los sustratos ligeramente ácidos: base de arlita, 75% de sustrato universal, 5% de sustrato ácido y 20% de arlita ;).
Abono
Cuando esté llegando la primavera, hazte con un abono líquido ecológico (guano, humus de lombriz o similar) y abónala cuando empiece esta estación hasta principios de otoño. Fácil, ¿no?
Si sigues todos estos cuidados y consejos, vas a poder disfrutar de una de las plantas con flor más bonitas del otoño/invierno año a año si conservas correctamente su bulbo. Recuerda también arrancar las flores y hojas muertas de la planta.