Nosotros encantados porque hoy os venimos a hablar de nada más y nada menos que de los geranios, esas plantas que suelen adornar todas las terrazas de bares y restaurantes en verano o que también encontramos en las macetas que decoran las paredes por toda Andalucía.
Como seguramente sabréis, hay muchas clases distintas de geranios y, de hecho, cada año van apareciendo nuevas especies… Pero las más conocidas siguen siendo: el geranio común, la gitanilla o geranio de hojas de hiedra, el pelargonio de pensamiento y los geranios con hojas aromáticas.
Cuidado de los geranios
El geranio es un planta poco exigente con sus cuidados, si se la mima un poquito mostrará encantada sus impresionantes flores y colores. Es una planta de exterior y soporta muy bien las altas temperaturas de hasta 30 grados, cosa que nos facilita muchísimo el trabajo 🙂
Mucha luz
La mayor exigencia que nos vamos a encontrar a la hora de cuidar los geranios es que necesitan como mínimo unas seis horas diarias de luz para que puedan florecer de manera rica y abundante. Pero esto no implica que los tengamos que dejar todo el día al sol… En las horas de más calor sería ideal que estuvieran alejados de la luz directa, de esta forma, evitaremos que sus brotes se puedan estropear y así favorecemos la aparición de las flores.
Riego de los geranios
Otro aspecto a tener en cuenta es el riego. No se debe abusar del agua, ya que las raíces de los geranios tienen tendencia a pudrirse a causa del exceso de agua. Pero tampoco se debe dejar pasar sed a la planta, porque entonces no tendrá fuerzas suficientes para florecer. Lo ideal (y para que tengáis una referencia) es que se rieguen dos veces por semana en verano. De todos modos, ¿queréis saber un truco para acertar con la cantidad perfecta de agua? Se tiene que mantener el sustrato ligeramente húmedo, de esta manera sabremos cuando se tiene que regar.
¿Cómo podar los geranios?
Si queremos que nuestros geranios estén espléndidos, a parte de regarlos y de procurar que les dé la luz, podemos realizar algunos otros cuidados para asegurarnos de que estén perfectos… Nos referimos a la poda. Podar los geranios es necesario para evitar que los otros brotes y ramas le roben la energía a nuestra planta y de esta manera pueda florecer. Lo ideal sería retirar las ramas más largas, ya que, estas florecen mucho menos que las más pequeñas.
Otros cuidados de los geranios
Una ayudita extra que les podemos ofrecer es utilizar abono para los geranios. Lo ideal sería haber empezado a abonar las plantas a principios de primavera con abono sólido. Si por el contrario vais un poco tarde, lo mejor será utilizar abono líquido, los geranios te lo agradecerán y brillarán muchísimo más. Con abonar los geranios una vez al mes sería suficiente.
¿Cómo garantizar que nuestros geranios se vean perfectos?
La clave del éxito de su floración se encontrará en la poda de otoño. Sí, has oído bien, en otoño. Para este época del año lo más recomendable es podar el geranio un tercio de su volumen y utilizar abono sólido antes de esconder las plantas ante las heladas del invierno. Tenemos que cuidarlos bien para que las hojas de los geranios no se pongan amarillas.
La Colvinpedia
No olvides que si te interesan las flores y en concreto los geranios puedes encontrar un blog dedicado a ellos 🙂