Hay flores que son más adoradas que otras. Pero a la protagonista de hoy no existe nadie en este mundo que no la venere. Es que es casi milagrosa, sirve para curar todos los males. ¿Quién no ama al aloe vera?
El aloe vera es otra de las plantas que prácticamente todo el mundo conoce. La que tu abuela te ha recomendado mil veces para la piel. Porque si te quemas, aloe vera. Si te sale una irritación, aloe vera. Sea para lo que sea esta planta va perfecta. Además, las abuelas siempre tienen la razón y más con todo lo que tiene que ver con curas naturales. Así que ya lo sabes ¡aloe vera!
Como las yayas lo dicen y por si te apetece tener una preciosa planta, porque sí, es de las amigas que dan rabia. Son perfectas, bonitas, listas y ayudan en todo. Así es el aloe vera. Bueno, si te apetece tenerla en casa te contamos todos sus cuidados y alguna que otra cosa más. ¿Preparados? Vamos que nos vamos.
¡Una de mimitos para el aloe vera!
El cuidado al que se tiene que prestar especial atención es el riego. Es una planta que necesita muy poca agua. Si se riega demasiado seguramente morirá. Para aquellos más despistados es una planta perfecta.
Lo mejor para saber si necesita beber un poquito más o no es la tierra. ¡Siempre hay que estar muy atento a la tierra! Pero no a la superficie, hay que hundir un poquito el dedo para ver si está húmeda. Si lo está, no hace falta regar más. Si está muy seca es hora de ponerle un poquito más de agua. Otra cosa en lo que te puedes fijar es en sus hojas, estas indican si necesita más agua o no. Si ves que se están arrugando, échale un poquito más de agua.
Vamos a hablar del maravilloso sol. En el caso del aloe vera necesita una exposición plena al sol. ¡Le encanta! Contra más sol mejor. Es una planta que resiste muy bien a la sequía. En cambio, si hablamos de humedad y frío la cosa no es tan prometedora. Es bastante sensible a las bajas temperaturas y al exceso de agua. Así que el sol y la poca agua son la clave.
Otro punto importante es el suelo. El suelo perfecto debe ser arenoso, un poco ácido y estar muy pero que muy bien drenado. Ya hemos visto que el aloe vera y el agua no son muy buenos amigos. Es como un gatito bonito.
Es una planta perfecta para tener en casa, tiene muchísimos beneficios y no necesita cuidados constantes.
Conoce un poquitín más al aloe vera
Hay una cosa muy peculiar en esta planta. No siempre tiene propiedades curativas. Si es muy jovencita estas todavía no las tendrá. Es a partir de los 3-4 años de edad, cuando es adulta que tiene estas propiedades. Es un dato muy curioso de esta maravillosa planta. Nos hace esperar un poquito antes de que podamos disfrutar de todos sus beneficios.
Seguramente ya sepas cómo es. Pero es que es taaan bonita que queremos hablar un poco de su aspecto. Sus hojas es lo que más llama la atención. Son carnosas y alcanzan unos 7cm de grosor. Es en ellas donde se encuentra la aloína que es lo que se utiliza como cura para todo.
Sus flores son monísimas. Aunque no es lo más conocido de esta planta. Son flores que tienen forma tubular y son pequeñitas. Normalmente suelen ser de color amarillo y aparecen de agosto a septiembre.
La Colvinpedia
No olvides que si te interesan las flores y quieres aprender más sobre sus propiedades y curiosidades no puedes perderte la Colvinpedia 🙂