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Portugal Hay alguien que se ha apoderado prácticamente de todos los ramos de la colección de flores secas. Tanto te sirve para desayunar como que queda espectacular en un ramo. La avena se convierte en un must en esta colección y nos recuerda lo importantes que son los desayunos.
Un porriedge de avena por la mañana, un cafecito recién hecho y unas flores hacen que los lunes sean menos lunes y que empieces el día con una energía que ni te imaginabas que podías tener. Porque la avena es preciosa, en los ramos queda retratado, pero además está riquísima y es sanísima. La que vale, vale. Si todavía no has tenido el placer de probarla, es hora de que lo hagas.
¿Quieres conocer más sobre este cereal tan maravilloso?
Ha sido decir su nombre y te ha venido su imagen a la cabeza, de eso estamos segurísimos. La avena es uno de los cereales más famosos de todos. No hay persona que no la conozca. Pero la mayoría de las personas saben que se come, pero no se conoce tanto cuáles son sus cuidados y cómo sembrarla. Porque sí, puedes plantar avena en casa si te apetece.
Vamos a ello. Tienes que saber que la avena se puede sembrar tanto en una maceta monísima como en el huerto o donde te venga mejor. Pero lo más importante es que es un cultivo bastante resistente. Esto siempre viene bien porque contra más resistente nos pondrá las cosas más fáciles.
Lo que hay que tener en cuenta para cultivar avena
El sol le da la vida. Hay que procurar que la avena tenga al menos unas 6 horas diarias de sol. El resto del día puede estar a la sombrita. Pero necesitará de su dosis diaria de la luz del sol. Si la tienes dentro de casa recuerda que la tienes que poner al ladito de la ventana un buen ratito cada día. Es un paso muy necesario para que la avena esté feliz.
La mejor época para sembrar la avena es (tambores) cualquier época del año. La verdad que no es algo muy importante, pero normalmente se suele hacer en invierno para cosechar la avena en verano. Pero tú decides. Hay algo que tienes que saber por si finalmente lo haces en invierno y es que no resiste a las heladas prolongadas. Así que si vives en un lugar donde el invierno es tan frío como el hielo mejor que no lo hagas. La avena lo pasará realmente mal.
¿Qué más nos faltaría? A sí, el riego. Siendo realistas la verdad es que le gusta bastante el agua. El riego de la avena al principio tiene que ser abundante, regándola cada dos o tres días. En el momento en el que haya germinado se pueden espaciar más.
Y en cuanto a la tierra lo más importante es que tenga nutrientes. La avena puede resistir a suelos compactos o sueltos, no es muy delicada con esto. Lo que sí que le encanta y necesita es un alto porcentaje en nitrógeno, cosa que con fertilizantes se consigue. No te tienes que preocupar por eso.
Con estos cuidados tendrás la avena más bonita ¡eso seguro!
Hablemos de plagas y enfermedades
Algo tan bonito y bueno no podía dejar indiferentes a plagas y enfermedades. Hay 3 que suelen ser las que más atacan a la avena. ¡Cuidadito con ellas!
Carbón vestido
Es una plaga bastante común en la avena y es una de las peores porque no se ve. Tu ves la plantita y por nada del mundo dirías que le está pasando algo malo, su aspecto es el mismo de siempre. Pero en el interior no es así. El grano está completamente lleno de polvo y negro. Para controlar esta plaga lo mejor es desinfectar el área y quitar los grano que se han infectado.
Roya anaranjada
Otra de las protagonistas que atacan a la avena. Es la plaga de la roya anaranjada. Es bastante mala, suele causar daños importantes, pero se detecta fácilmente. Tiene un color anaranjado que la delata. Para deshacerte de ella con insecticida y fungicida a tope.
Oídio
El oídio también se puede detectar con facilidad. Hace que a casi toda la planta le aparezcan manchas grises. Para combatirlo lo que se tiene que hacer es cambiar el fertilizante por uno con menos porcentaje de nitrógeno.
