Seguro que cuando has visto la foto has pensado…¿margaritas? Aunque son de la misma familia y comparten gran similitud, os tenemos que decir que no son la misma flor. Te contamos los cuidados, las características y el significado del crisantemo para que nunca más las vuelvas a confundir 😉
Para saber de dónde viene la flor del crisantemo tenemos que teletransportarnos hasta China y Japón, allá por el 1500 a.C. El nombre del crisantemo proviene del griego y tiene como significado literal “flor de oro”. Llegaron a Europa a finales del siglo XVIII gracias a la corte francesa y como casi todas las flores, el crisantemo también tiene una historia mágica para explicar su origen, hasta duendecillo incluido.
Dice la leyenda que una noche calurosa de verano, una joven paseaba por su jardín deambulando y pensando en su enamorado. Jugaba con sus manos por encima de las flores, acariciando sus pétalos. En un momento pensó en arrancar una pequeña florecita, para confiarle un temido “¿me ama o no me ama?” que no le dejaba dormir.
En el preciso momento en el que la joven se decidía a arrancar la flor, apareció un pequeño duende, que parecía el centinela del jardín, y le propuso un trato. Le concedería tantos años de vida como pétalos tuviera la flor que eligiera, a cambio de que fuera otra flor la elegida y no aquella que ya casi tenía entre las manos.
La chica empezó a correr desesperadamente buscando otra flor y tras algunos minutos de angustia, finalmente la encontró. Rápidamente se puso a separar y contar los finos pétalos: veinte, cincuenta, cien… Tras la explosión de felicidad de haber llevado la cuenta de tantísimos años para su enamorado se dio cuenta de que entre las manos tenía una flor que nunca antes había visto: el crisantemo.
Los pétalos de la flor del Crisantemo
La leyenda del crisantemo hace especial hincapié en sus incontables pétalos. Si alguna vez habéis tenido un Crisantemo entre las manos, habréis podido apreciar que por pequeñita que sea la variación, se compone de muchísimos y pequeños pétalos. Además, en muchas ocasiones se forman haciendo un cilindro, provocando incluso que parezcan flores hechas de tela o papel.
Existen más de 30 variedades de crisantemos y cada una tiene una forma y color diferente. Crisantemos blancos, amarillos, azul, verde, rojo… ¡no nos cansaremos jamás de ellos!
Cuidados del crisantemo
El crisantemo es una flor muy resistente y fácil de cuidar y además gracias a tu gran aroma te servirá como ambientador natural. Esta flor estará en la gloria en un ambiente fresco y si le toca un poco el solete (sin pasarse), aún mejor 😉.
Si quieres cultivar el crisantemo en maceta como planta de interior, será una de las mejores flores para hacerlo. Se adaptan rápidamente y no necesitan cuidados excesivos.
Aunque el crisantemo es una planta fácil de cultivar siempre es importante tener algunos cuidados básicos controlados. En primer lugar, los crisantemos deben estar en espacios bien ventilados, donde puedan disfrutar del sol, pero no de calor excesivo. También será importante que la tierra esté húmeda, pero no encharcada. Las flores pueden morir por falta de agua, pero aún más fácilmente por su exceso.
Otro consejo importante es que vayas eliminando las hojas y flores que se marchiten, de forma que ayudes a las que nazcan a tener mayor fuerza para crecer.
Crisantemo: Significado de una flor muy especial
El simbolismo de la flor del crisantemo siempre se ha relacionado con la felicidad, la perfección y la eternidad. Dependiendo del país en el que se encuentre su significado será algo diferente. En Japón, por ejemplo, comparte el podium de flor nacional con el cerezo. En China el crisantemo significa sabiduría, en EEUU alegría y positividad, en España se asocia con el Día de todos los Santos y en México si regalas un ramo de flores con crisantemos estarás declarando tu eterno amor a esa persona.