Sabemos que ha llegado el día, el deseado u odiado día. El momento en el que recibes el sagrado papelito. Aquel papelito que tanto ansias o tanto detestas, aquella lamina grabada con un nombre. El nombre de tu querido y estimado, ¡amigo invisible!
Y es que es vuestro momento, el momento de los detallistas, entusiastas y soñadores. El momento de los que contáis los días para la llegada de la Navidad, de los que os levantáis corriendo por la mañana a por vuestro chocolate del calendario de adviento, de los que lleváis semanas implorando por grupos de Whatsapp reuniros y celebrar las fiestas. Pero tranquilos, respirad, porque después de tantas suplicas, vuestros deseos han sido ordenes. Por fin han llegado las cenas de navidad, las que se comparten con familia, con amigos y con compañeros de trabajo. Las cenas en las que la comida corre y vuela siguiendo la sintonía de los villancicos más tradicionales. Ha llegado el momento de dar regalos y recibirlos.
Amigo Invisible
Con el acto de recibir y regalar es inevitable que no llegue el tradicional Amigo Invisible, el arcaico rito en el que se reparten aleatoriamente papelitos con distintos nombres. La finalidad de esta mágica distribución es llegar a conocer a la persona a la que tienes la obligación de entregarle el mejor de los obsequios. Deberás pensar en aquel detalle que le haga sentir el espíritu más dulce, que le provoque el cosquilleo de la Navidad. Quizás ese nombre que has recibido te es tan familiar que podrías saber sus gustos con los ojos cerrados o quizás es de aquella persona a quien le dedicas únicamente una tímida sonrisa durante el día. Sea conocido o por conocer, una vez tienes el sagrado folio entre las manos, es tu cometido pensar el mejor de los regalos. Déjanos adivinar, ¿calcetines, tazas, chocolate o zapatillas?Sabemos que puedes pensar más fuerte pero en el caso que te sientas estancado, porque no regalar, ¿flores?
Flores para el Amigo Invisible
Es una tarea de lo más complicada pensar un regalo, pensar en aquella cosa que debe llenar de felicidad a la persona que la recibe. Al final, no nos engañemos, acaba pasando lo de siempre. Caemos en los obsequios más típicos y míticos de estas fechas. Así que desde Colvin te proponemos que esta Navidad la inundes de flores. Si, lo sabemos, somos conscientes que algunos de vosotros estará refunfuñando, ¿las flores no son típicas y míticas? Permítenos decirte, Amigo Colvin, que estamos seguros que a pesar de que siempre estén rondando por tu cabeza, como el regalo ideal, nunca han acabado en las manos de tu amigo invisible. Las flores son aquel obsequio que siempre gusta, a las personas que más quieres y a las personas que menos conoces. Son un trocito de luz y de color que conlleva la sonrisa más grande de quien las tiene delante. Por lo tanto deja de estrujarte el cerebro y de caer en los calcetines de cada año y apuesta por flores y más flores. Para ayudarte, a continuación te proponemos diferentes opciones según el perfil del afortunado que recibirá tu regalo.
Para los amigos invisibles más sencillos y elegantes puedes apostar por un ramo de nuestra colección Originals. Flores que llegaran directamente del campo a las manos de su destinatario, sin necesidad de intermediarios. Ramos formados únicamente por rosas y lilium bañados en infinidad de colores y cortados de la forma más meticulosa. Esta colección conlleva la esencia más pura de las flores, ¿por qué no transmitirla?
Ramo Originals, modelo Snowflake
Si en cambio tienes un amigo invisible más atrevido por qué no jugar con la gama Always On. Puedes entregar un enorme ramo Sunday Mondays que inundará de ternura a cualquiera. Y, para ponerle la guinda al pastel, puedes presentarlo con un precioso jarrón que le dará al ramo la presentación que se merece.
Ramo colección Always On, modelo Sunday Mondays
Si por lo contrario te toca el nombre de aquel que cuando llegan las fiestas no se quitaría el gorro de Papa Noel puedes regalarle los ramos más navideños. Apuesta por una Poinsettia o por un precioso ramo de Amaryllis como es nuestro modelo Rudolph. Además, si quieres ser incluso más original, puedes entregarle una gran corona de Abeto para que su puerta sea la envidia de todos.
Ramo de la colección de Navidad, modelo Rudolph
Por lo tanto, atrévete a jugar con las flores y con la infinidad de opciones que te proponemos. Apuesta y estamos seguros que, ¡gana! Porque los amigos invisibles no dejan de crear el momento perfecto para ser generosos y agradecidos, aunque sea con personas que poco conocemos. Y permítenos decirte que las flores abren la puerta a transmitir todas estas emociones. ¿Te atreves con una Navidad llena de flores?