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Portugal ¿Te suena? Es que a esta flor la conoces. Es nuestro querido thlaspi. Exacto, ese que encuentras en alguno de nuestros ramos de flores. Sí, sí ese pequeñito con sus mil hojas. Se ha vuelto una pareja inseparable de nuestras flores. Por eso, hoy el protagonista es él y te queremos contar todas las curiosidades sobre el lepidium.
Datos interesantes sobre el lepidium
Su nombre y su origen
No importa la forma en que la conozcáis si como lepidium o como thlaspi. Esta pequeñaja consigue enamorar a cualquiera. Además, de esconder algo por ahí. Vale, lo aceptamos, nos encanta contaros las historias que hay detrás de cada una de las flores que forman nuestros bouquets. ¿Te apetece conocer la suya?
Vamos con su nombre primero. Su nombre científico es lepidium. Puede ser que por esto no le hayas conocido de primeras, le solemos llamar thlaspi. Este nombre (lepidium) viene del griego y significa pequeñas escamas. Si te fijas bien en sus flores te podrás hacer una idea de por qué decidieron llamarle así.
Dejando de lado su nombre científico, comúnmente se le llama de otra forma. Es conocido como ‘Lenteja de campo’. ¿Y esto por qué? Pues se debe principalmente a su lugar de origen, México. Concretamente se puede encontrar en América. Desde Estados Unidos a Guatemala.
Más curiosidades sobre esta preciosidad
Si os soléis pasar por aquí, ya sabéis que siempre os contamos que hay flores que son ‘las principales’ y otras que son las que ayudan a cerrar el diseño y hacer que quede espectacular. En el caso del lepidium es sin duda alguna una flor complementaria. Una flor que acompaña a las principales y da el último empujón para hacer que todo cierre a la perfección.
Ella es una de esas flores que consiguen dar movimiento y nervio a un ramo de flores. Vamos que sin ella la cosa no sería lo mismo. El aspecto salvaje y despeinado que consigue es uno de esos detallitos que hace que nos enamoremos perdidamente de los ramos. Porque sin las flores complementarias no tenemos bouquets.
¿Qué es lo que la hace tan especial? Sobre todo sus mini hojas y sus tallos larguísimos. Son las características que la definen y la verdad que nos encantan. Dan ese toque fresco y silvestre que hace que todo sea un poquito menos serio. ¿Has pensado ya en algún rincón donde colocar tu ramo? Con esta pequeña flor hará destacar cualquier sitio de tu casa.
Una pincelada sobre sus cuidados
Es una planta realmente resistente, pero su punto débil es el agua. Si le falta tiende a pocharse rápidamente. El agua limpita siempre tiene que estar en su vida.
Así que recuerda cuáles son los pasos cuando te llegue tu ramo. Abres la caja, lo dejas respirar, pones agüita en el jarrón, los nutrientes y ¡a dentro con él! No te olvides de cambiar el agua cada 2 días y te durará lo que no está escrito.
