Cómo ser una experta en el cuidado de plantas y no matarlas en el intento
Le estás empezando a coger gusto al cuidado de plantas. Además, se te da bien. Has conseguido superar la fase inicial, haciéndote cargo durante un tiempo de plantas para principiantes y ahora buscas nuevos retos. Quieres ampliar la variedad de plantas que hay en tu hogar, nuevas formas, nuevos colores, más vida. Que sean las amigas de tu madre las que te piden consejo, y no al revés.
¿Cómo seguir escalando peldaños en el trepidante mundo del cuidado de plantas? Lo primero, debes tener seguridad en ti misma. Saber que puedes hacerlo. Con un poco de dedicación, disciplina germánica, y poniendo mucho mimo en lo que haces. De esto último sabemos que vas sobrada. Así que permanece atenta a nuestros consejos y no te olvides de sonreír. ¿Hay una lista de plantas para las personas que ya tienen conocimientos sobre cultivo? No existía, pero ahora sí. Solo tienes que seguir leyendo.
¿Por dónde empezar?
Si no la conoces, te presentamos a Mónica, la Monstera Adansonii. Le llaman la planta del queso suizo por sus agujeritos. Se deja cuidar bien, aunque no es para todas las manos. ¿Por qué? Porque no le gusta el frío. Si te despistas y la temperatura baja de los 18 grados puedes perderla. Te irá bien con ella siempre que mantengas la temperatura ambiente en torno a los 20 grados. Por lo demás, luz indirecta, riego abundante en verano y regular en invierno.
Un toque tropical
Si estás pensando en dar un toque tropical a ese rincón especial de tu hogar, que nada te detenga. Al contrario de lo que pueda parecer, hay plantas preciosas que son, a su vez, no tan exigentes. Como el Philodendron Brasil, nuestra Petra. Podrás mantener ese verde exótico e intenso de esta trepadora siguiendo unos consejos básicos. Otra vez la temperatura es clave, por debajo de los 14 grados se resentirá. Así que nada de experimentos en la terraza. Con temperaturas altas en verano estará bien, pero hay que ser más constantes con el riego. Otra de las claves a tener en cuenta para que el cultivo de esta planta sea un éxito es la humedad. Viene de la selva y agradecerá crecer en un ambiente húmedo. Lo puedes resolver dejando un recipiente de agua sobre un radiador para que se evapore.
También procede de Brasil la Stromanthe Triostar. No te dará problemas si le garantizas un buen drenaje. En cambio, si permites que se encharque, sus raíces se pueden pudrir y la perderás.
Una más antes de dejar la selva amazónica. La Maranta Leuconeraura, nuestra Mercury. La llaman la planta de la oración, porque sus hojas se recogen durante el día. A simple vista, esta trepadora puede parecer misión imposible, pero no hay para tanto. La clave de su cuidado es la humedad. Mantenla siempre hidratada colocando debajo de la maceta un plato con agua. Verás que bien estará.
La Alocasia Wentii también es una planta exuberante, en este caso procedente de Asia. No es demasiado exigente, pero debes mimarla con riegos abundantes y asegurarte de que el sustrato está siempre hidratado.
Las Calatheas
No podemos olvidarnos de las Calatheas en nuestra guía de cuidado de plantas de dificultad media. Como en las anteriores, la humedad también es un factor clave para el óptimo desarrollo de estas plantas. Pulverízalas con frecuencia y prueba a colocar la maceta sobre gravilla humedecida. Son muchas las que puedes cultivar en casa, la Ornata, la Warscewiczii Jungle Velvet, la Orbifolia y la Majestica White Star. Nos centramos en la Calathea Lancifolia por su resistencia y belleza. Como sabes, sus hojas son de dos colores, verdes en la parte superior y rojas en el envés. Para un cuidado adecuado, mantenla a la sombra y retira las hojas deterioradas.
Cultiva un arbolito
Si tienes espacio en casa, te recomendamos que cultives un pequeño arbolito. Puedes empezar con un Ficus Lyriata. Se llama así porque sus hojas tienen forma de lira, mira si es bonito. Es sensible al frío, por lo demás no requiere mayor dificultad en su cuidado. Otra opción es el Ficus Elastica Abdidjan, nuestra Gala. Si le ofreces los cuidados de planta adecuados crecerá mucho. A partir de los 60 centímetros ponle un tutor para que no se doble.
Más difícil todavía
¿Y si me atrevo con una Begonia? Adelante, quién dijo miedo. Son unas plantas preciosas, impresionantes. Pero ojo, un poco judas. Les das lo mejor de ti, piensas que todo va bien y de la noche a la mañana empiezan a marchitarse. Vamos a intentar que no ocurra. Una de nuestras favoritas es la Begonia Maculata. No la pongas cerca de la ventana, riégala poco, abona bien y cambia el tiesto en primavera. Un consejo extra: no le gustan las corrientes de aire.